MAΦИЯ: así, en cirílico

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¿El juego del calamar? ¿Among us? No me hagas reír.

No niego que estoy predispuesto de forma muy favorable a la literatura rusa de ciencia ficción: mientras crecía esa era —igual que para muchos de mi generación— la fuente más cercana y accesible de este género, que nos hacía volar en naves hacia el cosmos y nos los planteaba dilemas técnicos, sino éticos, de los viajes en el tiempo. Aunque con una estética y un tufillo triunfalista de la victoria definitiva del comunismo a nivel global, era lo que había por obra y gracia de la censura.

Pero ¿qué le vamos a hacer? Los soviéticos (nunca dejamos de decirle despectivamente rusos) eran quienes nos ponían la teta en la boca, así que de alguna fuente había que chupar.

Aún con esa fuerte presión cultural, ya por las películas rusas, no había Dios que pasara. Si había alguna salvable, no puedo recordar su título, así que ni vale la pena que me esfuerce. Aunque los críticos de arte me lancen un anatema en forma de El acorazado Potemkin o Moscú no cree en lágrimas, eran intragables e invisibles, en su máximo significado.

La redención de los bogatires

Ya puestos, lo mejor que le pudo suceder tanto al cine como a la ciencia ficción rusa fue la caída del socialismo. Sin extenderme en el segundo aspecto, me basta con recomendarle a mis lectores Borrador y Copia en limpio, novelas de Serguei Lukiánenko. Sí, ese, el mismo de la saga de Los guardianes (que va por seis libros que, si no los has leído, andas tarde).

Lo traigo a colación porque las adaptaciones cinematográficas de sus Guardianes de la noche y Guardianes del día me indujo a pensar que tenía que reconsiderar mi animadversión a las películas rusas (ahora que sí eran rusas y no soviéticas), al menos en lo relativo a la CF y la Fantasía. También las de guerra, ya despojadas de patriotismo estalinista, dos horas de duración y lacrimosas escenas cursis de Mashenka y Kastanka.

Y es solo hoy que me topo con una verdadera joya de la filmografía rusa de ciencia ficción. A 6 años de su estreno, vale. Pero mejor tarde que nunca.

Мафия: Игра на выживание

La peli en cuestión se llama, en español, Mafia: el juego de supervivencia y se estrenó en el 2016. A golpe de sinopsis no prometía tanto:

“En el programa de televisión más popular del 2072, once personas se reunirán para descubrir quién es civil y quién es un mafioso. El ganador recibirá un gran premio en efectivo, pero los perdedores obtendrán la muerte”.

Meh. Pero como el cartel del filme tenía buena pinta y necesitaba una pausa de mi escritura, decidí darle una oportunidad. Menos mal que no revisé antes las críticas, porque este filme sólo le ha gustado al 73% de quienes lo vieron, recibe 3 estrellas de 5 en casi todos los portales de películas y gastó más de lo que recaudó, así que fue un fracaso de taquilla.

Desprejuiciado, me quedé a ver sus 91 minutos. Y no me arrepiento de haberlos empleado en escuchar la historia que la película cuenta.

No siempre un long seller es un best seller

Ni idea del por qué la película no es un filme de culto: desde la fotografía, la ambientación futurista estilo ciberpunk de Moscú, las actuaciones, los efectos especiales y, sobre todas las cosas, el guión de Andrei Gavrilov, no tengo absoluta y completamente nada que reprocharle a este filme.

Quienes me siguen en mis redes sociales y en este blog saben que no recomiendo a la ligera ni a menudo. Pero, salvo la super producción de Dune, no he visto en este año nada que me haya gustado más que Mafia. De corazón se los digo.

Pienso que es una de las películas que debieron tener una distribución más amplia para que fuesen del conocimiento de Occidente, pues sólo se estrenó en Rusia y China. Es muy probable que hubiera explotado en Norteamérica o Europa, pero simplemente se ahogó en un mercado que no supo valorar su estética y su propuesta.

Paradójicamente, un bodrio con las mismas premisas como la serie de El juego del calamar hace furor ahora. Y Among us explotó dos años después del estreno de Mafia, en 2018; convirtiéndose en tendencia mundial. Quizás no era el momento para la tesis de Mafia, pero vista con los ojos del 2021 es un tronco de película de CF que no tiene nada que envidiarle a ninguna superproducción hollywoodense.

Tampoco es que sea tan nuevo

Vale, la idea de un programa de participación dónde sus protagonistas pueden morir y de hecho mueren no es la línea argumental más novedosa del Universo. A vuelapluma recuerdo The running Man de 1987, con Arnold Schwarzenegger y basada en la novela homónima del maestro Stephen King. Más recientemente, la saga de los Juegos del Hambre.

Pero lo que sí es completamente inesperado en Mafia: el juego de la supervivencia es que las muertes de los jugadores se hagan efectivas en un entorno virtual televisado al más puro estilo de Matrix. Y no digo más, a riesgo de hablar demasiado y arruinar el final.

Y aquí lo dejo. Mi recomendación es que consigan la película y la vean: quizás no coincidan con mi opinión, o tal vez tengan una nueva cinta de culto, rescatada de las garras del olvido y la sepultura del tradicionalismo. Lo que sí no pienso es que vayan a quedar indiferentes ante esta propuesta del verdadero y reanimado cine de ciencia ficción al más puro y moderno estilo de hacer las cosas en la Madre Rusia.

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1 comentario en “MAΦИЯ: así, en cirílico”

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