Amablemente, el editor Luis Felipe Galeano de Atmósfera Literaria expresó sus puntos de vista en respuesta al artículo ¿Cómo escribirle a un editor y que (quizás) te haga caso?
En él, no me extraña. Además de ser el editor de dos de mis novelas (Matadero y La Herencia de los Patriarcas), ha sido una fuente invaluable de consejos sabios y atinados. Y me regaló Oficio editor de Mario Muchnik… sospecho para que aprendiese la lección y dejara de incordiarle cada dos segundos.
Si es menester, le contesto entre líneas. Pero como que apenas hace falta:
“Interesante reflexión a la que voy no sólo a dar mi humilde punto de vista, sino hacer una pequeña crítica. Primero la crítica: si dices que existe una carta y luego no la enseñas es jugar con ventaja. ¡Enséñala!, ¿qué más da? No sirve para nada”.
R/ Vale, pero soy escritor, ¿eh? Así que déjame poner un poco de suspenso al post, para que lo lean hasta el final.
En lo demás, coincido contigo y, siendo sintético, te comento:
a) corta y pega.- Todos lo hacen. Te das cuenta en muchos casos porque en el e-mail de envío sale el texto ‘list of undisclosed recipients’ que significa que el proyecto de escritor fue un rácano y sólo escribió un correo y se lo mandó a cientos. No importa. Tampoco sirve para nada.
b) Lo que quiero ver en la bandeja.- Me fijo en cómo se expresa el escritor en el sentido de si cuida su obra o es otro disparo en la oscuridad. Su obra es lo único por lo que lo van a medir, sea Perico Los Palotes o Vargas Llosa. Un escritor es tan válido como su próximo libro. Es más, todo lo anterior queda en un discreto segundo lugar. Inclina, pero no decide.
c) links emocionales.- no es algo que a mí me emocione. Hay un ejemplo muy bueno en la película El lobo de Wall Street cuando Di Caprio le pide a un colega: Véndeme esta pluma.
d) sobre el escritor.- breve bio y CV literario. Punto. Si tiene historia lo veré en Google. Si no tiene historia, da igual. El manuscrito decide.
e) redacción y ortografía.- Redacción inclina. Mala redacción no vende. Ortografía, si a estas alturas no utiliza un corrector de texto, es que tampoco cuida su obra.
f) miles de páginas.- un cuerpo de texto en el e-mail es como el flit para los insectos. Muy largo, ahuyenta al receptor.
g) enviar el manuscrito.- yo lo prefiero en formato Word y sin ningún tipo de ’embellecimiento’, es decir, tipos de letras, doble espacio, maquetación, etc. Yo también tengo Word. Si no lo leo bien, lo amplío: sé utilizar el Word.
h) humilde.- Da igual. Lo que separa al hombre del niño es la maldita fórmula de 10/10/10. Diez páginas del principio, diez por el medio y diez finales. Si en las diez primeras no captas la atención, te van a rechazar el manuscrito y así sucesivamente con las otras 10 y las 10 finales.
i.- críticas a los demás.- Nunca. Esta es una relación íntima, escritor editor y no el programa de Cristina, esa loca que monta juicios en la tele que acaban siempre en trompadas.
j) desesperado.- todo escritor nos escribe con cierto grado de desesperación y angustia. Está asumido. El escritor está poniendo a examen su obra y quiere gustar. No pasa nada. Además, el cuerpo del mensaje da igual. Lo que no puede uno es hacerse el pesado.
Por mi parte, yo siempre respondo a todos y, en todos los casos, explico los porqué en mayor o menor medida. Por eso, da igual que mandes la carta secreta de Hermes Trismegisto.
R/ Eh… nop. Bastantes pistas hay en el artículo original. Alimento águilas, no crío pollitos.
Al fin y al cabo lo único que va a delimitar el éxito del fracaso para conmover al editor es la maldita 10/10/10.
Claro, todo esto es mi más absoluta y personal opinión tras más de diez años buscando entre la paja esas agujas dignas de ser ofrecidas al público.
Ante esto, no hay mucho más que decir. Aunque sea la opinión de uno de mis editores (espero a que los otros se animen para engordar este post), queda claro que una cosa piensa el borracho y otra el bodeguero. Pero igual necesitan plantarse los dos en la barra y establecer un diálogo común de mutuo interés.
Sólo por si las moscas, dejo por acá los dos libros con los que he trabajado junto al Luife y me retiro muy lentamente…
Espero que estos consejos te sean útiles. Pero recuerda: no tienes que recorrer el camino del escritor tú solo. Puedes contactarme si deseas ayuda con tu obra, o solicitar los servicios que te ofrezco más abajo:
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Amigo Álex o debo decir Crixus. Comentas que: Igual necesitan plantarse los dos en la barra y establecer un diálogo común de mutuo interés. Eso es lo que ambos hemos estado haciendo en estos años. Hemos revisado tus escritos, pero también te he aproximado a revisar otros manuscritos en los que has visto, como decía Jardiel Poncela, ‘lo difícil que es pisar el asfalto en Broadway’ y, por último, como examen final, te he pasado escritos propios (en primeras versiones, eso sí).
Te he visto crecer en tu literatura y me enorgullezco por ello y por la pequeña parte que me toca. En cuanto al libro de Muchnik, aparte de sus lecciones magistrales, habrás comprendido sobre la paciencia, humildad y respeto que tiene que tener el editor con todo aquel que pregunta, quiere aprender y lo consigue.
Por todo ello, siempre mi respeto y mi gratitud. Cuando sea grande… bueno, ¡tú sabes!
Ah…un word bien tecleado! Mi puro por un buen texto sin enter, enter, enter, enter para cambiar de página y esas “plecas” en los diálogos predeterminadas del menú de viñetas y portadillas con letras a color y muñequitos….y no sigo que me quedo sin puros!
Vamos, máster! Háganos el honor de contestar al artículo y denos una panorámica de lo que usted espera en un primer acercamiento con autor.