Para quienes celebran las ferias de San Juan 😉
¡Vamos pronto! Que feria y payasos
nos esperan para hacer la velada
un poquito —mucho— más llevadera
que el hastío de jornadas pasadas.Es muy sano olvidarse las penas
junto al llanto, si salimos de casa
con la risa en la flor de los labios
y seguro ellos bien saben sacarla.Y ¡bailemos! si la música envuelve,
y gritemos, si con eso se calma
los dolores que por hoy, de momento
bien conviene los pongamos en pausa.Pues la feria nos llega en sorpresa,
tan feliz de ser bienvenida y ansiada
que acudimos sin contar nuestros pasos
que corremos hacia ella en volandas.¿Será acaso este un mal necesario
que nos muestra que algo nos faltaba?
No me importa, pues por hoy decidimos
que la risa es la estrella del alba.Pues que vengan fuegos de artificio,
–Álex Padrón, enero 2023
no demoren las coplas ni chanzas.
Ya habrá tiempo de volver a lo triste
cuando marche la feria mañana.
Si llegaste hasta aquí, dame un like (que sé que ta ha gustado). O déjame un comentario. O comparte esta entrada en tus redes sociales, para que otros me conozcan. Pero si realmente quieres ayudarme, puedes comprar alguno de mis cuadernos de poesía. Los enlaces para hacerlo están acá abajo:
Los mapas del tiempo, Editorial Primigenios 2019
El rosario del hombre de ceniza, Editorial Primigenios 2020
Thanatos y Eros, Editorial Primigenios 2021
La disyuntiva de la margarita. Revista Azahar 82, 2022
Bella y festiva poesía, Álex.
Antiguamente, la feria, el circo, los payasos, traían alegría y diversión con sus atracciones. Sin embargo, actualmente, supongo que debido, entre otras cosas, a las pelis y novelas de terror y a las malas noticias que los circundan, denotan tristeza y hasta cierto miedo y desconfianza. Hace mucho que no viene un circo a mi ciudad. Hoy en día todo se consume enlatado y desfasado.
A propósito, desde hace algunas entradas, el “Me gusta” aparece “cargando” y no es posible darle. Al menos, en mi navegador.
Un Abrazo.
Pues no sé de lo del “me gusta”, tendré que revisarlo pero ya en la mañana dos colegas me los regalaron…así que puede ser alguna dificultad con tu avatar o navegador. Acá, cuando niños -ha llovido un poco de eso- venía a menudo el cirso ruso (soviético en aquel momento) y era un verdadero espectáculo, porque además era uno de los más prestigiosos del mundo y eran muy profesionales. Aún tenemos una escuela de circo propia y una carpa permaente, además de numerosas actividades infantiles con payasos y otros profesionales. Así que puedo decir con orgullo que mi hija ha consumido mucho ese arte sin el estigma de la mala fama, aunque pienso que para cuando tenga nietos ya también eso estará obsoleto.