Cuelga a tu espalda la mitad de una vida
que vas cargando, en zurrón bien cerrado,
para que nadie y nunca osen hurgar en ella……no vayan a brotar fantasmas de un pasado
dónde tú eras aún tan cándida, al extremo
de sufrir por muchos que jamás te lloraron.A un paso de la puerta veo muchas maletas
y adivino en ellas los miedos al fracaso,
la incertidumbre cierta de zozobras y saltos
y profundos rencores, que van allí guardados.Me detengo a mirar, en tu capa y tu manto,
cómo ríes por fuera mientras lloras despacio
y tus lágrimas secas resbalan por dentro,
anegando tu alma, invadiendo tu espacio,
asfixiando las ganas de hacer tuyo el regazo
dónde duerma tranquilo y te abrace calmado.Mejor que te desnudes de todos tus resabios
para entrar, luminosa, a la mitad que guardo
de esta, tu otra vida, la que andas soñando
dónde la paz y el mimo son el remedio santo
a todos tus caprichos, peleas y desamparos.¿A qué temes entonces, mi ángel extraviado,
–Álex Padrón, abril 2022
mi dulce compañía, mi apuesta a largo plazo?
¿Qué tal tu vuelo ahora, ya libre de pecado,
al saber con certeza que tanto te he esperado?
Si llegaste hasta aquí, dame un like (que sé que ta ha gustado). O déjame un comentario. O comparte esta entrada en tus redes sociales, para que otros me conozcan. Pero si realmente quieres ayudarme, puedes comprar alguno de mis cuadernos de poesía. Los enlaces para hacerlo están acá abajo:
Los mapas del tiempo, Editorial Primigenios 2019
El rosario del hombre de ceniza, Editorial Primigenios 2020
Thanatos y Eros, Editorial Primigenios 2021
La disyuntiva de la margarita. Revista Azahar 82, 2022