Descansa en mí

Rizaré raudo un cayado de poemas
que me apoye, que me haga recordarte
que las letras que danzan saltarinas
toman fila para, este día, saludarte.

Este báculo que me esfuerzo por tejerte
no es quizás el más fuerte, pero arde
en deseos de que tu mano lo acaricie
y mostrarte que mi pecho no es cobarde.

Si lo llevas a tu vera, te aseguro:
no habrá arma más gentil para apoyarte
cuando vengan los problemas y las dudas
—siempre vienen a roer los estandartes.

Más si usas cual bastón mi poesía
que es mi alma, partida en cuatro partes…
Si me aceptas de muleta que te quiere
regalar todos los pasos con mis artes:

No habrá río que juntos no crucemos,
ni quebrada, ni montaña, ni baluartes.
Pues te amo y la musa me acompaña
para siempre un cayado para hoy darte.

–Álex Padrón, febrero 2023