Aunque disfrute —¡sibarita!— de lo bueno,
no es mi sino hacer ascos, aunque falte
esa gota de placer extraordinario,
ese toque de la magia que resalte.Como todos, me extasío en lo perfecto,
pero no será razón de relajarme:
si las rosas no son rojas e impolutas,
aun así, tienen derecho a perfumarme.Al final, cuando se espera lo exquisito
se soslayan las aristas más amables:
lo perfecto es lo enemigo de lo bueno,
y la vida, colección de bocacalles.Usaré todas las trabas que me pongan,
cada piedra que me lancen los cobardes,
para que de roca y tabla, mi castillo
se levante a pesar de los pesares.Cuando venga, pues, el pase de revista
habrá más de que gritar y criticarme.
Pero al menos habré hecho lo que pude,
y de vago no podrá nadie tildarme.Si llegase lo perfecto, ¡bienvenido!
–Álex Padrón, mayo 2022.
pero dile a lo que es noble que se afiance.
Si trabajo con las armas que me dieron
con amor, puedo hacer cosas relevantes.
Si llegaste hasta aquí, dame un like (que sé que ta ha gustado). O déjame un comentario. O comparte esta entrada en tus redes sociales, para que otros me conozcan. Pero si realmente quieres ayudarme, puedes comprar alguno de mis cuadernos de poesía. Los enlaces para hacerlo están acá abajo:
Los mapas del tiempo, Editorial Primigenios 2019
El rosario del hombre de ceniza, Editorial Primigenios 2020
Thanatos y Eros, Editorial Primigenios 2021
La disyuntiva de la margarita. Revista Azahar 82, 2022
Pues sí, la perfección es un fin, pero nunca debería ser el camino.
De los errores, las fealdades o los desastres pueden nacer las cosas más bellas. El amor es una de las mejores herramientas para ello.
Precioso poema, un Abrazo.
Gran poema, camarada. Cierras el mensaje de una forma bonita y elegante. Disfruté ese minuto de lectura.
Muchas gracias. Disfruté mucho de su creacción.