Si me dejo llevar por el “no se puede”, me quedo quieto y mato toda esperanza. Si, por el contrario, desarmo la negativa por partes y analizo cada pedazo por separado, llegaré a la causa que me impide hacer lo que quiero.

Hay miles de cosas que damos por sentadas y son invisibles —más bien, no reparamos en ellas— justo hasta el momento en que se marchan. Seguro puedes pensar en unas cuantas ahora, que la pandemia obliga a una cuarentena para la que nadie estaba totalmente preparado.

La Fiesta del Guatao es para los cubanos sinónimo de una celebración que termina en riña tumultuaria. Tiene sus raíces en una famosa confrontación que

Soy un caminador nato. Siempre lo he sido, y no estoy hablando de esos valientes que se lanzan de pecho al senderismo, o que hacen