Sin mitones ni vitrales me dedico
a una ingrata tarea: moler vidrio.
Ya veremos, si al final de los finales
es valioso hacer mi vida un estropicio.Con el polvo que me queda en el mortero
crearé estatuas, y botellas, y frasquitos
listo ya para el perfume o el veneno:
mi tarea es el forjarlos, no vivirlos.Allá tú con tu condena si en mi arte
vas creando las cadenas y los cirios
para hundirte poco a poco entre la bruma:
soy conducto y herramienta, no soy sino.De momento, seguiré firme entre crisoles,
mezclaré cosas sublimes, también ripios.
Yo prefiero sorprenderme en cada obra
que montarme mil cadenas para el timo.Y si ves que mi trabajo no merece
tu alabanza, tu sorpresa o tus gemidos
yo te invito a que te vayas para siempre
y te olvides si algún tiempo coincidimos.Quien no quiere ver el arte en lo imperfecto
–Álex Padrón, enero 2023
no merece aproximarse a lo divino:
yo me quedo en mis matraces y mis llamas,
vete tú a caminarte tu camino.
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Los mapas del tiempo, Editorial Primigenios 2019
El rosario del hombre de ceniza, Editorial Primigenios 2020
Thanatos y Eros, Editorial Primigenios 2021
La disyuntiva de la margarita. Revista Azahar 82, 2022